La película After Yang, del director Kogonada, presenta la historia de una familia que intenta salvar a su hermano cyborg llamado Yang en un futuro hipotético en el que los robots han sido creados para diversos fines. La trama se mueve entre las vicisitudes de la memoria del joven desconectado, y la narración dislocada a través de los recuerdos que su disco duro conserva. El matrimonio formado por Kyra y Jake, interpretados por Jodie Turner-Smith y Colin Farrell respectivamente, se esfuerza por unir los retazos de su protagonista a través de la acción de recuperar la conciencia de su hermano robot.

La película hace uso de la ciencia ficción y se une a la acción del matrimonio para tratar de encontrar una solución a la posible desaparición de Yang. El relato se mueve a través de los desiguales recuerdos que el disco duro de Yang conserva, y los diálogos alojados en la memoria del cyborg, reflejando sus disonancias y dudas. Las miradas del robot a su propia figura en el espejo son también reflejo de una búsqueda de su propia existencia, una huella de su realidad que termina expuesta públicamente, como los autorretratos de la fotógrafa Vivian Maier.

La película utiliza la fórmula de contraplanos que se solapan con el mismo sonido que se ha escuchado segundos antes desde una nueva perspectiva visual, realizando una reconstrucción posible pero confusa de la memoria del protagonista robótico. La trama explora las tensiones entre la humanidad natural y la de un ente que ha sido creado por el ser humano y siente la existencia como propia. La historia, aborda la intrascendencia, a través de la ciencia ficción.

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